¿Cómo aliviar los cólicos de mi bebé?
Todo el mundo dice que los cólicos del lactante son un fenómeno benigno y transitorio, ¿qué puedo hacer para tranquilizarlo y mantener la calma?
Signos característicos
Desde hace varios días, el adorable bebé que hasta ahora era tranquilo y crecía sin problemas llora sistemáticamente durante el día y en ocasiones también por la noche. Se muestra más irritable que de costumbre, su "pena" parece inconsolable. Y, lo que es peor, le provoca unos gritos agudos que no habías escuchado hasta ahora. Con la fatiga acumulada, cada vez llevas peor este gran cambio de actitud. En una palabra: te sientes angustiada. Sientes que el equilibrio familiar se afecta. Es normal. Consúltalo con el pediatra, pero seguro que se trata de los temidos cólicos.
¿Qué son los cólicos?
Los cólicos son dolores abdominales que sobrevienen de forma intensa y frecuente. El cólico se expresa con llantos, agitación (el bebé se retuerce de todas las maneras posibles) y gases. Según las estadísticas, cerca del 40% de los bebés sufren cólicos entre las dos semanas y los tres o cuatro meses de edad. Las causas pueden ser múltiples: inmadurez del sistema nervioso y digestivo, ansiedad de los padres percibida por el bebé, sobrealimentación, intolerancia, alimentación de la madre, entre otras.
Si tu bebé presenta estos síntomas desde hace unos días, pide cita con el médico o pediatra para que te confirme que se trata de cólicos.
Tareas para hacer en casa
Te presentamos una serie de consejos que te ayudarán a calmar a tu pequeño, esto ayudará sin duda a que toda la familia esté tranquila y vuelva el equilibrio al hogar:
• Consulta con un profesional de la salud: es lo primero que debes hacer para estar segura que el cólico es el causante del llanto de tu niño. Dicho profesional podrá guiarte con consejos y técnicas científicamente demostradas. Consúltale acerca del beneficio que el probiótico L.reuteri (L.comfortis®) puede ofrecer a tu bebé.
• Durante la lactancia: evita aquellos alimentos que percibas que afectan a tu bebé. En algunas ocasiones las madres reportan que ciertas especias, alimentos de la familia de las crucíferas (col, brócoli, col de Bruselas...) y las legumbres (alubias, frijoles...) afectan esta condición. Da un solo pecho por toma para que tu pequeño se beneficie de la "leche grasa" (del final del pecho), que previene los cólicos.
• Masajea suavemente el vientre del bebé en sentido horario, ponle sobre el abdomen una bolsa de agua tibia envuelta en una toalla (el calor va muy bien para el dolor) y usa el portabebés (la posición vertical les alivia hasta tal punto que en países donde los niños van siempre a cuestas de sus madres no se aprecia la presencia de cólicos).
Importante: Debido a que la succión calma los dolores intestinales, el bebé tenderá a querer comer siempre, con el riesgo de que, si come mucho, podrá aumentar su dolor.
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